Se dice que la duración de las vacaciones es directamente proporcional a la intensidad con la que nos afecta el síndrome post-vacacional. Cuanto más largas son, mayor pesar sentimos de tener que volver a nuestro día a día. Si la vuelta al trabajo y a los quehaceres diarios se te están haciendo cuesta arriba, quédate a leer este post, en él te damos ideas de cómo sobrellevar el regreso de las vacaciones y de cómo afrontar la vuelta a la rutina de forma positiva.
Nada mejor que establecer una rutina saludable
Si llevabas a cabo hábitos saludables basados en alimentación, deporte y descanso es la hora de volver a ellos. Si no los tenías, es momento de planificarlos y cumplirlos. Está demostrado que mantenerse activo, llevar a cabo una alimentación saludable, descansar y dormir correctamente tiene efectos positivos sobre la salud tanto física como psíquica. Y ¿qué mejor que sentirse con fuerza y llenos de energía para empezar un nuevo curso?
El día a día nos desgasta mucho, por eso, es indispensable mantenerse en forma, sólo así podremos seguir el ritmo que dicta la vuelta a la rutina: reuniones, vuelta al cole, trabajo, cocina, cambio de armario y un largo etcétera. Desde Carrasco Ibéricos, te recomendamos que practiques algo de deporte, al menos, 30-45 minutos al día. Si eres de los que te cuesta empezar, proponte dar un paseo largo una vez finalizada la jornada laboral y no lo retrases o canceles por otros planes. Piensa que ese paseo es medicina para tu salud.
También te aconsejamos que te reserves un par de horitas en el fin de semana para planificar y realizar la comida de la semana siguiente, así evitaremos hacer uso de comida rápida en días en los que podamos estar más cansados o en los que tengamos menos tiempo para cocinar.
No renuncies al ocio durante la semana
¿Quién ha dicho que no hay ocio en la vuelta a la rutina? Solemos caer en un error cuando se terminan las vacaciones. Nos metemos en una rueda difícil de parar en la que sólo tienen cabida las obligaciones. Pero haznos caso, reservar tiempo para el ocio es tan importante como cumplir con todas nuestras responsabilidades.
Si los lunes se te hacen cuesta arriba, te proponemos quedar con amigos después de tu jornada laboral o hacer algún plan divertido con los peques de la casa. Si lo que se te hace larga es la semana, planifica este tiempo de ocio a mitad de ella, los miércoles por ejemplo. Consiste en buscar una motivación con la que despertarnos con mentalidad positiva para afrontar de la mejor forma el día o la semana.
Y, por supuesto, el fin de semana es para disfrutar y descansar. Si tienes algo pendiente, intenta hacerlo el sábado por la mañana y olvídate del trabajo, ya sea de oficina o doméstico, durante el resto del finde. También puedes planificar algún viaje a la playa o a la sierra, según tus preferencias, para continuar disfrutando y que no te dé la impresión que la vuelta a la rutina ha terminado con las posibilidades de desconectar. Te damos una idea, ¿se te ocurre un mejor plan que sacar entradas para un musical de la Gran Vía de Madrid y disfrutar después de unas cervecitas y los mejores embutidos ibéricos de Guijuelo en el puesto de Carrasco del Mercado de San Miguel?
Date un tiempo de adaptación y flexibiliza tu agenda
Después de un tiempo de desconexión en el que, seguramente, hemos alterado nuestro reloj biológico, es más que normal que nos cueste retomar la rutina. Por ello, es muy importante que bajes tu nivel de exigencia. Tómate un par de semanas para que tu cuerpo y tu mente se vuelvan a acostumbrar a madrugar y a asimilar el estrés del día a día. En definitiva, date tiempo para adaptarte.
Por otro lado, sé flexible con tu agenda. No vale de nada planificar todas las horas del día porque, al principio, seguramente, no llegarás a todo. Deja horas libres para poder hacer frente a los imprevistos y vuelve a tus rutinas habituales de forma paulatina para no agobiarte y evitar así el síndrome postvacacional. Poco a poco irás volviendo a los niveles de productividad que alcanzabas antes de tus vacaciones. Recuerda que la agenda ha de ser tu amiga en la vuelta a la rutina y ha de ayudarte a planificarla, no queremos que se convierta en el principal motivo escondido detrás de tu ansiedad o estrés.
Haz algo que te apasione en la vuelta a la rutina
Volver a la rutina no es fácil pero depende de ti lo difícil que sea. Por este motivo, te recomendamos que busques algo que te apasione, pero que te apasione de verdad.
Si te apasiona bailar, es el momento de apuntarte a esas clases de baile a las que siempre te has querido apuntar. Si lo que te gusta es la cocina, busca un taller de cocina internacional o de batch cooking para sacar todo tu potencial frente a los fogones. Si te encanta el interiorismo, aprovecha para mejorar algún rincón de tu casa, eso sí, no es momento de meterte en obra. La idea es buscar algo que te mantenga 100% motivada y sólo estarás así si lo que estás haciendo de verdad te gusta.
Búscate un hobby para que, por muy larga que se te haga tu rutina laboral, tengas siempre tras ella la recompensa de hacer lo que verdaderamente te gusta.
Mímate
¿Por qué dejamos este consejo para el final si lo consideramos el más importante? Porque queremos que sea el que nunca olvides. Es primordial cuidarte, dejar de exigirte y permitirte algunos momentos de placer para superar la vuelta a la rutina. A continuación, te proponemos algunos planes para mimarte:
Tratamiento estético
Septiembre es el mejor momento para reservar cita en tu peluquería/barbería o en tu centro estético para realizarte un cambio de look, un tratamiento de hidratación capilar o un masaje drenante. Sentirte bien por fuera es importante para sentirte bien por dentro.
Tarde de shopping
Date un paseo por las tiendas de ropa que más te gusten y descubre sus nuevas colecciones. Se acerca el otoño y es momento de renovar el armario. Y si no tienes mucho tiempo o no te gusta hacer cola en cajas o probadores, coge asiento, descarga las apps de las marcas de ropa que sueles vestir en tu móvil y pasa una agradable tarde de shoppping online.
Vino y jamón
¿Existe mejor combinación? Ha llegado el final de una larga e intensa jornada, has cerrado la agenda y los niños ya están acostados. Te sugerimos descorchar una botella de vino y abrir un blister de jamón ibérico mientras ves una serie en Netflix, avanzas un par de capítulos del libro que te estás leyendo, o, simplemente, meditas sobre las cosas positivas que también tiene la vuelta a la rutina. Para este plan, tenemos el mejor pack de vino y jamón, un lote compuesto por una botella de Roda Reserva de 2017 y 5 blister de jamón de bellota 100% ibérico Carrasco.
Esperamos que este post te haya sido útil para retomar el día a día con fuerza. Si tienes alguna idea más para superar el regreso de las vacaciones con el mejor ánimo posible, te invitamos a compartirlo abajo, en los comentarios. Y recuerda!, proyectar siempre un pensamiento positivo es esencial en este proceso de transición.
Va a ser un gran año! Disfrútalo y recuerda, ya queda menos para las próximas vacaciones 🙂
Me apunto al plan de Netflix con vino y jamón, que también hay que aprender a mimarse un poco.